¿Cómo funciona el blanqueamiento?
Los productos de blanqueamiento actúan penetrando a través del esmalte para blanquear la dentina. Las sustancias empleadas en la actualidad son el peróxido de carbamida y el peróxido de hidrógeno en diversas concentraciones y formulaciones.
Estos productos consiguen una reacción química de oxidación que hace que el diente aclare su color sin afectar a la estructura de los tejidos. Deben usarse siempre bajo supervisión de un dentista para emplear las dosis y tiempos correctos.
El efecto del blanqueamiento es permanente, aunque los dientes pueden volver a oscurecerse con el tiempo, ya que seguirán expuestos a los factores que hemos enumerado anteriormente. En general puede ser necesario volver a realizar el tratamiento pasado mínimo 2 años.
Se debe tener en cuenta que muchas tinciones severas, especialmente las provocadas por empleo de tetraciclinas, que presentan bandas grisáceas no pueden resolverse completamente mediante blanqueamiento. En estos casos extremos habrá que recurrir al empleo de coronas cerámicas, que ofrecen una base de color blanco opaco, que nos permitirá camuflar la tinción de la dentina.
El blanqueamiento no cambia el color de las prótesis de cerámica, ni los empastes de composite, por lo tanto el color de las rehabilitaciones que haya en la boca seguirá siendo el mismo tras el tratamiento por lo que será recomendable cambiarlas una vez conseguido el blanco deseado.
Existen tres técnicas de blanqueamiento:
- Blanqueamiento de dientes vitales con fotoactivación:
Este tratamiento se realiza en la consulta dental. Consiste en aplicar sobre los dientes un capa de gel blanqueador en altas concentraciones. Las encías y los labios deben ser cuidadosamente protegidos para evitar todo contacto con el producto. Una vez aplicado el gel, el efecto oxidativo de éste se potencia mediante una luz de LEDS, o bien un láser especialmente indicado para uso dental. El tratamiento dura unos 60 minutos y se puede conseguir un blanqueamiento de entre 4 a 6 tonos en la escala de color. Este tratamiento no causa molestias ni dolor, si bien en algunos casos puede haber algo de hipersensibilidad al frío y al calor que desaparecerá enseguida. - Blanqueamiento de dientes vitales mediante gel: En este caso el tratamiento se lleva a cabo en casa con unas cubetas que se adaptan con exactitud a la forma de sus dientes. En su casa usted colocará en la cubeta un poco de gel en el espacio de cada diente y luego ajustará la cubeta en la boca para que el producto actúe durante un tiempo determinado, según las instrucciones de su dentista. El periodo va de 15 días hasta 3 meses en caso de tinciones severas.
- Blanqueamiento de dientes no vitales:
Son dientes no vitales aquellos que han sufrido un traumatismo que ha afectado al nervio dentario y a los que se les ha realizado una endodoncia. En estos dientes hay que realizar un blanqueamiento interno introduciendo en el canal del nervio dentario el producto blanqueador. Este procedimiento se realiza exclusivamente en la consulta dental.
¿Son eficaces los productos blanqueadores que se venden en comercios y farmacias?
Los productos que se venden directamente al público contienen una menor concentración de principios activos para evitar problemas en la aplicación que puedan perjudicar la salud. En cualquier caso es muy importante evitar el uso de productos que puedan resultar abrasivos, puesto que a primera vista los dientes se blanquearán pero aparecerán problemas más graves a medio plazo.